Con la primavera, también florecen las alergias
Accedé a novedades, encuestas, notas, links, entrevistas y artículos de interés vinculados a la salud, el ambiente, el agua y mucho más. Hacé click en los títulos o buscá el tema de interés en el buscador.
Notas de Interés
Con la primavera, también florecen las alergias
Las alergias son reacciones exacerbadas de nuestro sistema inmunológico ante determinados factores. Con la llegada de la primavera (y también al comenzar el otoño) recrudecen los síntomas de las enfermedades alérgicas, en especial de las vías respiratorias, como la rinitis y el asma. ¿Cuáles son los factores típicos de la primavera que producen esta reagudización de los síntomas, tales como congestión y obstrucción nasal, lagrimeo, estornudos, secreción nasal acuosa, tos y crisis de asma?
El comienzo de las etapas de polinización (fecundación) de numerosas especies vegetales, tales como los pastos (Gramíneas), las plantas y los árboles, además de pólenes de cereales, se extiende hasta el otoño siguiente. Los pólenes son llevados por el viento, y la primavera es una estación “ventosa” por excelencia. Hay que tener cuidado con las confusiones y recordar en todo momento la importancia de un diagnóstico precoz y certero.
También proliferan los insectos y las cucarachas, estas últimas con un notable aumento, en los últimos tiempos, de su rol como desencadenantes de “sensibilización” alérgica. Las picaduras de insectos pueden producir reacciones alérgicas, algunas graves, como por ejemplo la picadura de las abejas y de las hormigas coloradas.
Es una estación en la que proliferan las virosis respiratorias, y todas ellas aumentan la aparición y exacerbación de los fenómenos alérgicos. Obviamente, el comienzo de una vida de mayor actividad al aire libre, nos expone a todos estos factores. Es muy importante señalar que no siempre los síntomas que presenta el paciente son “alergias”, y que muchas veces la automedicación, por ejemplo con las famosas “gotas nasales” o con antihistamínicos cuyo uso se ha popularizado, pueden conducir al enmascaramiento de cuadros de diversa índole, cuya importancia puede ser igual o aún mayor que la de las patologías alérgicas, tales como rinosinusitis crónicas, infecciosas, etc.
Actualmente, la medicina cuenta con recursos poderosos y seguros para el diagnóstico, la prevención, el control y el tratamiento de estas enfermedades alérgicas. En materia de diagnóstico, lo primero que se hace es un estudio exhaustivo con los más modernos análisis de laboratorio, como son los dosajes de las inmunoglobulinas en general y de las inmunoglobulinas E específicas de alergenos (RAST), así como también de los intermediarios químicos de la inflamación. Con ello se determina el estado general del sistema inmunológico y los niveles y participación de los mecanismos de la alergia.
Con el avance del diagnóstico por imágenes, nuevos métodos se suman para complementar el diagnóstico y mejorar el tratamiento.
En el caso de las alergias respiratorias, tienen gran relevancia los Estudios Radiológicos y la Tomografía Computarizada, así como la Espirometría, muy útiles para determinar el grado de compromiso de las vías respiratorias, así como evaluar las capacidades y funciones pulmonares, ayudando a detectar o prevenir precozmente una eventual complicación respiratoria que pueda afectar gravemente la salud del paciente.
Una vez confirmada la etiología alérgica de la enfermedad, se realizan los alergológicos específicos (Prick Test) y se determina qué factores ambientales le desencadenan los síntomas, con el objetivo de poder implementar las medidas necesarias para evitar el contacto con los alergenos desencadenantes de sus padecimientos y poder definir una inmunoterapia adecuada.
Las recomendaciones para prevenir y atenuar los efectos de la primavera en personas alérgicas son:
- Es conveniente no ventilar la casa dentro de ciertos horarios diurnos, para evitar el ingreso de pólenes, y asimismo disminuir en lo posible la actividad al aire libre.
- Evitar estar al descubierto con ropas de colores vivos, descalzos y sin anteojos.
- Conviene llevar las ventanillas de los automóviles cerradas, todo ello especialmente en los días ventosos y soleados.
- Evitar el contacto con insectos, combatiendo su ingreso a los interiores.
- Ser especialmente cuidadosos en la desinsectización de los hogares, eliminando especialmente las cucarachas, que aumentan en esta época del año, y con la llegada de los primeros calorcitos.
- Quitar alfombras fijas, limpiar con trapo húmedo, lavar frecuentemente la ropa de cama y los cortinados, aislar los colchones y almohadas con fundas impermeables, todo ello destinado a disminuir el contacto con los ácaros del polvo doméstico, así como mantener limpias las mascotas (perros y gatos).
- Ante la aparición de síntomas respiratorios, es indispensable la consulta en forma inmediata, para evitar la progresión que conduce a cuadros severos y potencialmente graves.
Dr. Bernardo José Ludmer - Médico Especialista en Alergia e Inmunología - Instituto Dr. Enrique Rossi M.N. 42698
Publicado: 23-10-2013
Notas destacadas
PSA es Salud
Calculá tu nivel de hidratación
¿Sabés cuántos vasos de agua necesitás diariamente?
Necesitás 8 vasos
de agua por día *
*La cantidad de líquido que debe ingerir por día una persona adulta varía entre los 1500 y 2200 cc en situación de salud, temperatura ambiental no exageradamente elevada y actividad física no deportiva ni extrema.